Si tu tejado presenta filtraciones, tejas sueltas o un deterioro visible, lo más probable es que necesite una reparación urgente para evitar problemas mayores como daños estructurales o costosas reformas. Para arreglar tu tejado de forma efectiva, es esencial identificar el tipo de daño, contar con los materiales adecuados y contratar a profesionales experimentados. En este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la reparación de tejados para que tomes las mejores decisiones y evites futuros inconvenientes.
1. Identificar los Problemas Comunes en un Tejado
Antes de realizar cualquier reparación, lo primero es identificar qué problemas está presentando tu tejado. Algunos de los daños más comunes son:
- Filtraciones de agua: Suelen ser causadas por tejas rotas, desplazadas o problemas en el sellado de las juntas.
- Tejas sueltas o rotas: El clima extremo, como el viento o las tormentas, puede aflojar o romper tejas, lo que deja expuesta la estructura inferior.
- Goteras: Normalmente detectables en el interior de la vivienda, las goteras indican problemas graves en la impermeabilización.
- Desgaste en la impermeabilización: Con el tiempo, las capas impermeables se deterioran, permitiendo la entrada de humedad.
- Problemas en las chimeneas o claraboyas: Las zonas alrededor de chimeneas y ventanas suelen ser puntos débiles donde pueden producirse filtraciones si no están correctamente selladas.
2. Materiales y tipos de tejados
Dependiendo del material de tu tejado, las soluciones de reparación pueden variar:
- Tejas de cerámica o arcilla: Son comunes en climas cálidos y secos, pero pueden agrietarse con el frío o el impacto. En estos casos, es importante reemplazar rápidamente las tejas dañadas.
- Tejas de pizarra: Duraderas y estéticas, aunque su reparación puede ser más costosa. Requieren un manejo especializado para evitar que se rompan durante el proceso.
- Tejados de metal: Son más resistentes y duraderos, pero pueden corroerse con el tiempo. En caso de corrosión, se debe limpiar y aplicar tratamientos antioxidantes.
- Tejados de tejas asfálticas: Frecuentes en climas templados, estas tejas pueden desgranarse o soltarse. La reparación suele implicar reemplazar las piezas dañadas y sellar las juntas.
3. Pasos Básicos para la Reparación de Tejados
- Inspección del tejado: Es fundamental realizar una inspección minuciosa para identificar todas las áreas afectadas. Esto puede implicar revisar tanto la parte exterior del tejado como la estructura interna del ático o la buhardilla.
- Reemplazo de tejas o materiales dañados: Una vez localizados los problemas, las tejas rotas o sueltas deben ser reemplazadas por nuevas. En caso de deterioro en la impermeabilización, es recomendable aplicar una nueva capa.
- Sellado y aislamiento: Después de sustituir las tejas, se deben sellar las juntas, especialmente alrededor de las chimeneas, claraboyas y zonas críticas donde puede entrar agua.
- Revisión de la estructura: Si el daño ha afectado la estructura de madera o el aislamiento del tejado, es necesario evaluar si es suficiente con un refuerzo o si se requiere una reparación más profunda.
4. ¿Debería Reemplazar el Tejado Completo?
En algunos casos, especialmente si el tejado es muy antiguo (más de 20-30 años) o si hay daños estructurales graves, puede ser más rentable y seguro optar por la sustitución completa del tejado en lugar de reparaciones puntuales. Las señales de que tu tejado podría necesitar un reemplazo incluyen goteras recurrentes, grandes áreas de tejas dañadas o deformaciones visibles en la estructura.
5. Importancia de Contar con Profesionales
Reparar un tejado puede parecer sencillo, pero implica riesgos y requiere experiencia. Contratar un equipo profesional especializado en la reparación de tejados garantiza un trabajo seguro y de calidad, además de evitar errores costosos. Los profesionales cuentan con el equipo adecuado, conocen las normativas de seguridad y pueden ofrecer garantías sobre el trabajo realizado.